Según una encuesta realizada por la empresa japonesa de juguetes eróticos Tenga en 2019, la masturbación masculina la había practicado, al menos una vez, el 93 % de los españoles. Además, es nuestro país el que encabeza la lista sobre este hábito, por encima de otros, como Francia o Alemania.
A pesar de la influencia judeocristiana en nuestro país a lo largo de los siglos, la mayoría de la población ha hecho oídos sordos a tantos prejuicios basados en mitos. Pensar que es malo masturbarse es una creencia que no la sostiene la ciencia.
Así, si has recibido una educación sexualmente restrictiva o erotofobia, este artículo es para ti. El onanismo es completamente natural y no es incorrecto. Por lo tanto, no debería causar sentimientos de culpa y, mucho menos, de vergüenza.
Mitos sobre la masturbación masculina
El imaginario popular está plagado de mitos que se han ido difundiendo generación tras generación. Algunos de ellos son
Es un acto que se realiza solo en la adolescencia. Aún hoy hay quienes creen que la masturbación masculina es una forma inmadura de obtener placer. Lo cierto es que no hay edad para ella
- El que se masturba se hace adicto
Si se tiene pareja estable, no es normal practicarla. Por el contrario, no tendría por qué ser excluido. En ocasiones, realizarlo previamente al acto sexual retarda la siguiente eyaculación y se obtiene un mayor placer.
- Salen pelos en las palmas de las manos.
- Ocasiona atrofias físicas.
- Genera pecas y acné.
- Causa ojeras.
Lo peor de todo esto fue que la misma comunidad médica contribuyó a difundir estos bulos sin ningún tipo de evidencia. Así, a mediados del siglo XVIII, Tissot llegó a afirmar que la masturbación causaba melancolía, ceguera, impotencia, oligofrenias, demencias y calvicie e, incluso, llegó a describir cómo era un corazón masturbador.
¿Qué sacaban de tantos bulos sobre la masturbación masculina?
Pensamos que muchas de las personas que contribuyeron a difundir los mitos realmente estaban convencidas de esa creencia. Si la religión tiene importancia en el mundo actual, siglos atrás su peso era aún mayor. También algunos gobernantes, Carlos V por ejemplo, prohibieron esta práctica bajo pena de muerte.
Al margen de ideas religiosas y puritanismos, una razón para esta fijación la podemos encontrar en la necesidad de aumentar el número de súbditos. Las autoridades creían que la masturbación, improductiva para concebir, podía sustituir a las relaciones sexuales. En definitiva, era una cuestión de poder.
¿Cómo un hombre puede masturbarse?
Para hacerse una paja existen diversas técnicas. Las más habituales son:
Estimulación de la erección. No es propiamente una paja porque se utiliza cuando el pene está en reposo y deseas su excitación. Sujeta con una mano el tronco del pene y, la otra, ponla sobre el glande. Es la que se encargará de los movimientos lineales de arriba hacia abajo hasta conseguir su total erección.
Método tradicional. Se realiza con movimientos ascendentes y descendentes lineales desde la base del pene.
Método enroscado. Entrelaza tus manos y sitúa el pene en medio. Descubre qué presión de manos es la que más te agrada y prueba nuevos movimientos.
El autodescubrimiento es lo que debes practicar. Así podrás descubrir el ritmo que más te agrade. Por otra parte, si has tenido algún problema de eyaculación precoz, te puede ayudar mucho a solucionarlo. Solo debes detenerte cuando estés a punto de eyacular y, posteriormente, continuar.
Además de tus manos, para masturbarte puedes utilizar multitud de juguetes sexuales que contribuyen a que obtengas un mayor placer o estimulen tu imaginación. También te resultará todo más sencillo si usas lubricantes y geles.
¿Qué beneficios tiene la masturbación masculina?
- Te invita a autoconocerte para saber con qué prácticas gozas más sexualmente y tus puntos más erógenos. Sin embargo, no es el único beneficio. También mejora tu salud corporal y mental. Algunos de estos beneficios son:
- Protege contra infecciones y otras patologías del aparato urinario. En este caso, vaciar supone renovar y limpiar. Algunos expertos señalan que ejerce también una función protectora contra el cáncer de próstata.
- Mejora el estado de salud general en pacientes con diabetes de tipo II según un estudio de la Universidad de Sidney.
- Reduce los síntomas del síndrome de piernas inquietas, según una investigación publicada en el Medical Journal of Sleep Medicine
- Posee efecto desestresante. Durante la masturbación se estimula la producción de una gran variedad de neurotransmisores, como la dopamina, que es una de las responsables de nuestra sensación de bienestar. Por otra parte, se produce una gran liberación de tensiones.
- Mejora el estado de ánimo en casos de depresión.
- Facilita el sueño. El orgasmo hace que el córtex entre en reposo. A eso le debes sumar que, entre los neurotransmisores que estimula, se encuentran la vasopresina y la oxitocina que, junto a la melatonina, contribuyen a que duermas mejor.
- Refuerza el sistema inmunitario gracias a la liberación de cortisol.
- Ayuda en casos de disfunción eréctil.
- Mejora las relaciones de pareja.
¿Qué riesgos conlleva la masturbación masculina?
Hay un mito más que hemos dejado para el final y que debes conocer. Algunos dicen que es una práctica compulsiva. Si bien es cierto que es difícil establecer la frecuencia que sería considerada como normal, si no interrumpe tu ritmo de vida, no tienes nada que temer.
Por otro lado, siempre que lo disfrutes es sano. Es bueno masturbarse. En el caso de que tengas la percepción de que no controlas o que te sientes mal de la manera y con la frecuencia con la que la realizas, debes consultar a algún psicólogo o sexólogo.
En definitiva, la masturbación masculina es una práctica natural y sana que aún constituye un tema tabú para algunas personas. Sin embargo, te ofrece grandes beneficios tanto físicos como mentales. Además, mejora tu respuesta sexual y la calidad de tu relación de pareja.
Bibliografía:
- BORDÓN, Federico y otros: «La masturbación en clave de derechos. Desarmando mitos (2ª parte)». Flasses On-line, nº. 6 2020.
- BARDI, Alberto y otros: «Masturbación: mitos y realidades». Revista de la Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología, 2003
- BALAREZO LÓPEZ, Gunther: Creencias acerca de la masturbación. Ediciones Hontanar, 2014.