Hablar sobre triángulo amoroso resulta tan complicado, que debemos primero enfocarnos en conocer cómo es realmente estar enamorado, y cómo se puede llegar a distorsionar ese concepto tan bello del amor.
El enamoramiento es algo que va más allá de una simple atracción física, abarca todo lo que a esa persona se refiere. Amar verdaderamente es reconocer todo de ese ser, sea malo o bueno. Es comprender y entender que esa persona a la que amamos tiene defectos y aun así debemos aceptarlos.
Es importante lograr diferenciar entre el amor y la atracción, el amor abarca muchos otros aspectos; en cambio, la atracción es solamente física. El amor es poder proyectar un futuro con esa persona, en cambio, la atracción puede ser una sensación pasajera o momentánea.
¿Es posible estar enamorado de tu pareja y sentirse atraído por otra persona?
A veces muchas personas experimentan el sentimiento de sentirse atraído por otro individuo distinto a su pareja, pero lo importante es saber diferenciar ese aspecto que tiende a confundir: la atracción.
La mayoría cae en triángulos amorosos, que al principio les resultan divertidos y excitantes, pero con el tiempo se tornan complicados porque cada vez se vuelven más conflictivos y obsesionantes.
Siempre en una relación de tres, uno de los dos o hasta los tres involucrados; sufre. No puede evitarse la decepción y muchos menos si sale a la luz la verdad, que por más oculta que se puede tener; se corre el riesgo de descubrirse en la peor situación.
El sexo puede influir a recaer en triángulos amorosos
Hablar de sexo con nuestro compañero sentimental es un poco difícil, hay parejas que al no conseguir hablar de este tema y no saber expresarse o comunicarse de cuáles son los gustos de cada quien, se pueden generar conflictos graves.
Siempre que sea complicado abordar este tema de la intimidad, habrá dudas, confusiones y poca compresión hacia el otro. Y se puede correr el riesgo de buscar en otra persona lo que falla en esta. Pero todo eso pasa por la mala comunicación o simplemente porque no la hay.
¿Quién es el responsable de que sucedan los tríos amorosos?
Cuando los triángulos amorosos surgen en una relación, ambas partes son las responsables de que esa deslealtad o traición ocurra. Una relación siempre será de dos y los problemas como las alegrías son de ambos.
La pareja es un sitio de comunicación, entendimiento, tolerancia y sobre todo empatía. Cuando dos personas se encuentran bien, no cabe la posibilidad de un tercero.
Para superar un triángulo amoroso hay que salir de él lo más rápido posible, y estar consiente que todas las partes involucradas sufren. La sensación satisfactoria y de adrenalina es momentánea y debes ser juicioso sobre lo que en verdad quieres.
Siempre y cuando se está consciente de que lo que se está viviendo a escondidas tiene fecha de caducidad, puedes salir a tiempo y evitar daños reversibles en tu relación. Pero si la sensación que te genera el triángulo amoroso te atrapa y te consume, cada vez se hará más difícil salir de ese círculo vicioso.
Una decisión que nunca llega puede tornarse un ciclo obsesivo y repetitivo. Los psicólogos recomiendan pedir ayuda a familiares o personas cercanas para tratar de reflexionar, o simplemente buscar apoyo o consejos con un psicoterapeuta.
Mario Guerra, psicólogo famoso; comenta que según estudios e investigaciones, solo un 4% de los esposos dejan su relación para unirse a una nueva vida con otra persona.
Se comenta también que relaciones extramatrimoniales no duran mucho porque son vistas como un espacio de diversión y lo importante son las necesidades de la pareja seria, es decir, la relación matrimonial que le da importancia a la familia.
Cómo superar un triángulo amoroso
Lo más importante en un matrimonio es la comunicación, la cual genera la confianza y es la base de toda relación. Saber que somos humanos, cometemos errores y asumir las consecuencias de nuestras decisiones; también es un gran paso.
El saber o estar consciente de que se causará un sufrimiento a la persona que realmente amas, es el mejor motivo de dejar ese triángulo amoroso que es un vicio, algo tóxico que dañará y perjudicará en el futuro.
Por eso, la base de toda relación siempre será el amor, y con ello nacerá la comunicación, tolerancia, empatía, complicidad y muchos otros aspectos positivos que se deben trabajar mutuamente para mantenerlos activos.
Por eso lo primero que se debe hacer, para superar o evitar seguir con ese ciclo o unión de tres, es asumir que se generará un daño e impedir una causa peor. Es necesario reconocer el error, perdonarse y alejarse de esa atracción momentánea y trabajar en el matrimonio.
Trabajar en las fallas que se encuentran en el matrimonio o noviazgo es lo fundamental, hay miles de maneras para recuperar todos los aspectos positivos que se encuentran dormidos o no se perciben en el presente de tu relación.
Uno de los mejores consejos es ir a especialistas o terapeutas de pareja, sexólogos y hasta amigos de gran confianza que ayuden a que la llama del amor pueda volver a surgir de nuevo para mantenerla activa.
Lo importante es que nunca nada estará perdido siempre y cuando haya amor, y si te encuentras enamorado de tu esposa o esposo; todo tiene solución ¡Qué viva el verdadero amor!